¿Querías dolor y sufrimiento? Pues toma tres tazas. Un grupo de sadomasoquistas austriacos respondieron a un anuncio publicado por una dominatrix que ofrecía “una disciplina estricta”, pero en lugar de embutirse de cuero y recibir los castigos intuidos acabaron trabajando en las tareas de una granja de vacas… y pagando por el privilegio.
Unos 15 hombres respondieron con entusiasmo al anuncio publicado en Internet por una mujer de 35 años, aunque sólo dos o tres de ellos llegaron a aceptar la oferta. En lugar de saborear el “dulce placer del dolor” y recibir severos azotes al estilo ’50 sombras de Grey’, los voluntarios se vieron cortando madera y alimentando al ganado, desnudos, eso sí, y recolectando la cosecha con ropajes de cuero, en una granja cercana a la ciudad de St Pölten.
La supuesta dominatrix era en realidad una divorciada que estaba corta de ingresos e ideó el plan para lograr que los masocas trabajaran gratis, amén de sacarles unos euros por su estancia. No ha trascendido cuánto pagaron los hombres por llevar a cabo las tareas de la granja, pero lo cierto es que después de una semana de duro trabajo se dieron cuenta de que les estaban tomando el pelo y decidieron abandonar sus herramientas.
Los burlados sadomasoquistas han denunciado a la mujer por “prostitución ilegal”, según ha confirmado un portavoz de la policía austriaca: “Llevaban ese tipo de ropaje que suele llevarse en esos círculos: ropas de cuero y plástico y máscaras”, apuntó el policía.
Noticia original en Spiegel, vía nuestro fan fatal Luis Miguel. ¡Gracias!