En el siglo XXI, parece que nadie es interesante si no tiene algún tipo de desorden psicológico o trauma infantil que contar para amenizar cualquier tipo de reunión social. Son los tiempos que corren. No permita usted que su hijo o hija sea una aburrida “persona normal”. Todos podemos ser especiales si recibimos el regalo apropiado cuando somos pequeños.
Bromas aparte, no nos extrañaría que algún pequeño rechazara algún juguete como estos: desde animales destripados a coches grotescos, pasando por muñecos cuyas profesiones… y atributos… no son quizá los que deseáramos en un juguete. Atención, padres despistados: tomen nota de lo que NO deben comprar.
La muñeca-stripper
Una profesión tan respetable como cualquier otra, pero que, nos tememos, no deja de ser una salida cuando te han fallado tus otros planes. Hasta ahora: tu niña puede jugar a bailar en la barra, hacer “lapdances” y ganar generosas propinas que guardar en el tanga. Nos falta el muñeco del novio y la autocaravana donde viven ambos.
Ruleta Rusa Jr
¡Tranquilo, que no salen balas de verdad! Sólo se trata de acostumbrar al crío a la emoción de este gran juego, en el que se pueden ganar importantes sumas económicas. Un pie de plástico impactará el cabezón de tu crío para indicar que los hados no le han favorecido.
La ouija para niñas
¿Tu hija no se pierde ni un programa de ‘Cuarto Milenio’? Déjate de Monopolis y regálale una bonita ouija rosa (¡y con su fundita y todo!). ¿Le gustas a Manolo el de 6ºB? ¡Los espíritus de los difuntos te lo dirán!
El muñeco descuartizado
Si quieres que se recuerde el nombre de tu crío, convertirser un sanguinario psicópata siempre es buena opción para alcanzar la fama. Con este muñeco podrá ir acostumbrándose a la dura labor que le espera. La fama cuesta.
El cerebro-móvil
El trauma es seguro. O tu hijo no se pone a llorar del asco… o nunca superará el hecho de que jamás podrá tener un coche más chulo en toda su vida. ¡Es el mejor coche del mundo (salvando a KITT, claro)!
La almohada de Superman
No hay más que ver el aspecto de la supuesta almohada. “Hincha, abraza, juega”, reza la caja. Quizá si el niño es pequeño no pasará nada, pero por encima de los 4 años, resultará turbador para cualquier pequeño. Procurad no dejarla al alcanza del vecino rarito del tercero.
El muñeco de Justin Bieber
Justin Bieber ya está pasadísimo de moda. Regalarle esto a tu niña evidenciará que no está a la última y será el hazmereír de la clase. Si te lo pide tu hijo, por otro lado, no te preocupes: hoy en día todo el mundo puede casarse. Siempre hay un tiesto para una mierda.
Bebés deformes
Una cosa son los pequeños monstruitos… y otra regalarle estos muñecos. Ideales para meterles miedo con el efecto de las antenas de telefonía móvil, el cloro del agua o su causa de preocupación favorita. Parecen sacados de “Las colinas tienen ojos“.
Animales reventados
Si al crío le gustan los animales…. también es importante educarle en lo que es la pérdida de los bichos. Con los juguetes ‘Roadkill Toys‘ podemos escoger entre una amplia gama de muñecos con las tripas al aire: gatos, mapaches…
El Hulk superdotado
Y no nos referimos precisamente a su intelecto, que es más bien escaso. Cuando Bruce Banner se convierte en La Masa, todo su cuerpo crece. Todo.
Imágenes vía Taringa, Lointeresante y RinconAbstracto. ¡Gracias al agudo Mario Cordobés por el aviso!
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